No somos parte de la sociedad, la sociedad no es parte de nosotros. Si nosotros no formamos parte de la sociedad, y por lo tanto quedamos excluida de ella, nos sentimos mal, sin embargo, si nosotros no queremos formar parte de la sociedad, a esta, ni le va ni le viene.
Así es nuestra sociedad, que tanto daño nos hace y tan poca consideración tiene hacia nosotros si nos descuidamos un momento de nada. Y a ella hay que perdonarle poco, después de todo la gente es así, así es la sociedad que hemos creado…
En el medio la gente mayor, la gente nos preocupa ahora, en este primer número de rumorosos.com. La pregunta que ronda en el aire es sencilla; son los mayores parte de la sociedad o están discriminados por ella, buena pregunta de dudosa respuesta. Los siguientes artículos se hacen esta pregunta, con valentía, sin renuncia a través de una reflexión sobre la propia sociedad en la que vivimos.
Los tiempos difíciles que vivimos en la actualidad resultan especialmente propicios para reflexión, ahora que se derrumban los gigantes con pies de barro, incluso los gigantes que nunca se debieron levantar se pone todo en duda; llegará el dinero para las pensiones, reducirá el gobierno los presupuestos para gasto social, podrá resistir la seguridad social y el estado del bienestar… todo pasa de felizmente asimilado a dolorosamente cuestionable.
Rumorosos.com apuesta por el debate social, y lo incrementa con esta reflexión, desde dentro, desde las palabras de los profesionales que trabajan en la Asociación Cultural Galega de Formación Permanente de Adultos, entidad colaboradora de la Xunta de Galicia, que hace con su labor, un importante acercamiento no sólo de los mayores la sociedad o de la sociedad de los mayores, si no un acercamiento que trata de mostrar la sociedad a la inmensa actividad que hacen los mayores.
Por último, una última pregunta con trampa, una tramposa: por que nos preocupamos tanto en reflexionar sobre los jóvenes en la sociedad si ya nunca más volveremos a ser coma ellos y no lo hacemos tanto por los mayores cuando todos nosotros sí seremos como ellos. Son nuestros jóvenes más importantes que nuestros mayores… supongo que no, quiero pensar que no, puede que las palabras de los siguientes artículos nos permitan dilucidar un poco más el tema.